Para muchas personas comprar un reloj de lujo es una gran forma de expresión. Este representa una importante inversión de tiempo, valor, diseño, función y calidad. A cambio, se adquiere un producto diseñado para proporcionar toda una vida de disfrute y más. Es una decisión de compra importante.
Es por tales razones que elaboramos una pequeña guía para comprar un reloj de lujo. Tratamos de cubrir los aspectos más importantes, desde cuáles son los factores a tomar en cuenta hasta la manera como cuidarlo para que este perdure por largo tiempo.
Por qué comprar un reloj de lujo
Más que todo para los hombres, los relojes Hublot, por ejemplo, son uno de los pocos accesorios socialmente aceptables, pero también se trata de una expresión abierta sobre los gustos de una persona. Para las mujeres, estos forman parte de un conjunto de joyas que, pueden o no, estar en tendencia, pero aun así, no dejan de ser igualmente un modo de expresión de estilo y estatus.
Algunos deciden comprar un reloj de lujo simplemente porque su aspecto les llama la atención, de hecho, muchas marcas y modelos pueden considerarse un arte. Otros son entusiastas de la ingeniería mecánica interna. He aquí varias razones por las que tener un reloj de lujo tiene sentido.
Su calidad
Los relojes de lujo de marcas más reconocidas son fabricados por artesanos expertos que usan materiales de alta calidad. Además, estos se someten a pruebas exigentes para comprobar la misma. Son fiables en la precisión y calidad de construcción. En general, soportan mucho mejor el desgaste y ofrecen una mayor protección contra daños.
Longevidad
Si se cuida adecuadamente, un reloj de lujo durará varias décadas y hasta más, como es el caso de los relojes Tag Heuer. Si se usa regularmente durante años o décadas, un reloj se asocia íntimamente con su dueño. La capacidad de un reloj de lujo para resistir el paso del tiempo significa que puede transmitirse a las generaciones futuras. Puede incluso convertirse en una reliquia significativa, un rito de paso o un recuerdo duradero.
Es el mensaje adecuado
Un buen reloj puede estar contigo todo el tiempo, incluso mucho más que el móvil. Es un objeto que probablemente mirarás todos los días, así que elegir uno de calidad transmitirá un buen mensaje de autoestima. Este mismo mensaje será percibido por los demás.
Por otro lado, los relojes de lujo son muy respetados y los que aprecian los detalles más finos se fijan rápidamente en ellos. Llegan a transmitir el aprecio por las cosas buenas de la vida.
Considera dónde usarás tu nuevo reloj de lujo
Es relevante considerar qué uso se le dará al reloj, si será diario o se compra con un fin específico o para lucirlo en ocasiones especiales. Aparte de dar la hora, se diseñan para diversos usos. A grandes rasgos, hay un protocolo de vestimenta que decreta cuál es el estilo apropiado en determinados entornos y ocasiones.
Tienda de prestigio y consejos de cuidado
Comprar a un distribuidor oficial tiene muchas ventajas. Ante todo, se debe garantizar la autenticidad del producto (con los documentos que lo acompañan, etc.). También se asegura que recibirá cualquier garantía disponible y que se cumplirán los términos. El comprador que no tiene experiencia también puede pasar por alto el aspecto del mantenimiento futuro de un reloj de lujo.
Consejos para su cuidado
Es natural querer mantener el reloj como nuevo y reluciente durante el mayor tiempo posible, por lo que le ofrecemos algunos consejos sobre cómo cuidarlo en los próximos años:
- Tenga en cuenta el agua, el calor y los imanes: Debes conocer sus limitaciones y que tanto el agua, como el calor, los golpes y cambios bruscos de temperatura pueden dañar sus componentes de movimiento.
- El contacto estrecho con campos magnéticos puede afectar negativamente la precisión de un reloj de lujo, así que se debe evitar el contacto con imanes siempre que sea posible.
Limpia periódicamente tu reloj de lujo para eliminar la suciedad y el polvo. Sobre todo, después de usarlo en agua salada o en la piscina, es necesario limpiarlo con agua dulce, además girar el bisel para evitar la corrosión de las piezas metálicas. Utilice un paño suave y húmedo, un cepillo de dientes suave y un bastoncillo de algodón para llegar a lugares de difícil acceso.