“El perro es el mejor amigo del hombre” es una frase conocida y aceptada por todos los que tienen y adoran a su mascota. Son extremadamente fieles, y el vínculo emocional que crean con su dueño es innegable. Los adoran, porque siempre están para lo que se necesiten: compañía, socorro, asistencia o trabajo. Sin olvidar los juegos y la diversión con los niños y adultos.
Bulldog inglés: el perro nacional de Gran Bretaña
Reino Unido posee una raza de perro muy antigua, el bulldog inglés, que está considerado como el perro nacional de Gran Bretaña. Poco a poco se ha convertido en una de las mascotas más queridas y populares del mundo, por lo que los cachorros bulldog ingles son muy recomendados como compañero de juegos y mascota de niños de todas las edades, ya que son muy tolerantes y pacientes con ellos.
Esta raza fue desarrollada en Gran Bretaña cuando importaron un perro de toros maltés, también conocido como perro africano, cuyos antecedentes más antiguos datan del siglo XVI. Según la historia, inicialmente era una raza de pelea que se enfrentaba a toros, osos y todo tipo de grandes y fieros animales.
En 1.835 se prohibieron este tipo de peleas en Inglaterra, y esta raza estuvo a punto de extinguirse. Afortunadamente, unos criadores decidieron criarlos con un temperamento más apacible.
Niños con autismo mejoran con perros de terapia
Teo Mariscal es criador de labradores y encargado de entrenar a adiestradores, es también el presidente de la Fundación Bocalán, conocida internacionalmente por operar en varios países. Explica con emoción lo que se pretende conseguir con la ayuda de estos perros de raza, entre los que destaca el bulldog ingles, como perro de terapia en casos de niños con autismo.
Estos animales facilitan la interacción entre el terapeuta y el niño. Son utilizados como un refuerzo en las actividades que menos le gustan o las que le son más adversas a éste. Con el animal se logra atraer su atención y el pequeño entonces se siente motivado. Un perro es muchísimo más reforzador que unas pompas de jabón o unas ricas galletas. Al ser un ser vivo, existen más variables para llamar la atención del niño, e incluso se logra que el perro también disfrute de la compañía.
Murió Zsa Zsa, el perro más feo del mundo
En una perrera de Missouri había vivido casi toda su vida Zsa Zsa, una perra bulldog como los que se pueden ver en Bulldogtribe, que ostentó uno de sus ejemplares el simpático premio de «El perro más feo del mundo» en un certamen celebrado en la ciudad de Petaluma, en Estados Unidos.
El tierno animal de 9 años, de cara muy arrugada, patas demasiado combadas, dientes muy salidos y lengua extremadamente larga que le llegaba al suelo, no pudo disfrutar mucho tiempo su galardón, pues murió mientras dormía en su cama.
El insólito concurso se celebra desde hace más de 50 años, con la noble intención de promover la adopción de perros que nadie quiere. La ganadora obtuvo 1.500$ de premio y un pasaje de avión a Nueva York para el animal y su dueña, a fin de ser publicitado en distintos medios.
La genética está en riesgo
Canine Genetics and Epidemiology, una revista especializada en canes, publicó un artículo donde asegura que la raza bulldog inglés carece de la diversificación de los genes que se necesitan para minimizar los problemas en su salud derivados de la raza, como cáncer, alergias y displasia de cadera. Por esta situación los criadores bulldog ingles están estudiando su genética, que les proporciona un rango de vida de 8 a 10 años.
Estos resultados concluyen en que son tan parecidos en cuanto a su genética, que si sigue la crianza selectiva, pueden generarse nuevas mutaciones y su salud irá en franco deterioro, como consecuencia de esto.
Los expertos están pensando en la necesidad de cruzarlos a fin de mejorar la raza de las próximas generaciones. Una opción puede ser el Olde English Bulldogge, derivada del americano y el inglés, y ya se están haciendo ensayos y pruebas.