En el mercado hay desde aparatos antiguos para decorar, a la tecnología más avanzada que permite hasta bordar en diferentes materiales, como seda o cuero. Para ello, hoy en día existen páginas especializadas que analizan las ofertas existentes para elegir la mejor máquina de coser, según el uso que se le vaya a dar, teniendo en cuenta el precio y las funciones con las que cuenta.
La costura es una actividad versátil que puede servir para entretenimiento, para resolver emergencias con la vestimenta o para generar un trabajo lucrativo. Una máquina de coser es una aliada a la hora de conseguir un acabado profesional y una labor detallista, pero no todas son iguales.
Contar con una máquina de coser en casa, es tener una herramienta que permite despertar la creatividad, ahorrar una cantidad de dinero al poder reparar las prendas de la familia, servir de fuente de ingresos extras, tener la base de un verdadero emprendimiento o ser una forma de entretenimiento para los adultos mayores.
El trabajo textil artesanal es hermoso, no obstante, en el mercado actual existen máquinas capaces de emular gran parte de las funciones de la costura de manera más rápida, automática y eficiente, acelerando los tiempos de entrega de los trabajos realizados de manera manual.
Para todos los gustos y necesidades
En el mercado actual existe una gran variedad de máquinas de coser para seleccionar, dependiendo de la actividad que se desea realizar con ella, están desde las más sencillas a las más avanzadas.
Una manera de dar con lo que se busca es visitar páginas comparadoras como el sitio web https://imaquinasdecoser.com, plataforma que ofrece un minucioso análisis de las ventajas y desventajas de cada opción, así como las ofertas y da a conocer dónde poder adquirirlas, tanto si se trata de máquinas para el hogar como para una empresa de costura.
Hay portátiles, electrónicas, modernas, profesionales, bordadoras, para coser cuero, remalladoras, industriales y las antiguas, que además de servir para la costura, son piezas muy apreciadas para la decoración.
Si lo que se quiere es una máquina de coser para adornar un negocio o una casa al estilo retro, de forma online pueden conseguirse varias alternativas, desde el popular modelo negro con adornos dorados de mediados del siglo pasado, a otras más antiguas que se han convertido en tendencia vintage, sobre todo para decorar un local, tienda de modas o de textiles.
También hay máquinas de juguete para niños de más de ocho años que muestran inquietudes en el mundo de la costura. Algunos modelos son tan funcionales como las máquinas de los adultos, pero más seguras. Es una muestra de apoyo para los sueños de los pequeños, además de ser bastante realistas.
De principiante a profesional
Si es para tener en casa y destinar a labores sencillas, lo ideal es decantarse por alternativas más económicas que son ideales para principiantes. Hay modelos básicos y low cost de todas las marcas, con características básicas. Estas máquinas de coser son de fácil manejo, lo que permite efectuar labores de costura sin requerir gran experiencia.
No se requiere una gran inversión para aprender a coser o para reparación de costuras, hacer dobladillos u otro tipo de manualidades a pequeña escala. Las más baratas son aquellas que tienen menos funciones, no obstante, eso no debe quitar méritos a la calidad del trabajo. La página de comparativas mencionada facilita elegir aquellas que combinan más beneficios por una menor inversión.
Hay máquinas portátiles manuales que sirven para efectuar pequeños arreglos o reparaciones de las prendas, son de tamaño reducido, incluso caben en un bolsillo. La ventaja es que se pueden llevar a cualquier lugar, pero sólo tienen uso limitado y para material de poco grosor.
Los profesionales, por su parte, requieren aparatos más complejos, con más prestaciones, algunas incluso tienen funciones electrónicas programables. Hay máquinas de coser digitales que ofrecen decenas de tipos de puntadas, con iluminación LED o pantallas LCD, a través de las cuales se pueden configurar y programar el diseño de la costura o bordado.
Algunas máquinas modernas cuentan con funciones básicas y hasta 30 tipos de puntadas, pantalla digital, con funciones adicionales para coser ojales, así como la posibilidad de costura tubular para prendas complejas como mangas o perneras para todo tipo de prendas.
Para trabajos a gran escala están las máquinas industriales. Éstas son más veloces y están diseñadas para grandes volúmenes de costuras, especialmente para fábricas. Generalmente permiten coser todo tipo de material, desde la tela más delicada al cuero, por ejemplo.
Proyectos especiales
La selección de la maquinaria también depende del material con el que se trabaja. Entre las más populares están las máquinas bordadoras que permiten elaborar diseños en diferentes tejidos.
En el mercado hay aparatos de este tipo desde un precio medio hasta los más elevados, dependiendo de las funciones y el acabado que se quiera conseguir, además del tipo de material (tela, cuero) o de la prenda (gorras, zapatillas, gorras, camisetas, tejanos).
Otras alternativas son las overlock o remalladoras, destinadas a trabajar con materiales de gran grosor.
También están las destinadas a coser patchwork, tejido de varias telas para formar una sola, usado especialmente para mantas y colchas. Son aparatos electrónicos, con más de 100 puntadas disponibles y una gran variedad de posiciones para la aguja.
Trabajar con cuero implica exigencias especiales, sobre todo si se requiere costuras y bordados. Para este material se necesita un tipo de aguja con un grosor específico y agarraderas especiales, pues se trata de un trabajo muy artesanal.
Una vez definido el proyecto para el cual se quiere la máquina, falta revisar las diferentes ofertas en el mercado. La página comparadora anterior facilita ese trabajo al mostrar en el sitio web las diferentes alternativas, ordenadas según rango de precios, marcas y funciones.
Toda la información a mano hace más sencillo elegir la inversión que más convenga, teniendo en cuenta los avances de la tecnología, las funciones de la máquina y la relación precio-calidad. Están ordenadas desde la más económica, la más costosa y las mejores de cada tipo. El fin siempre será sacarle el mayor provecho a la inversión y las funcionalidades, según las necesidades y el uso que se le vaya a dar.