Según el último informe presentado por Indepaz (Instituto de Estudios para el Desarrollo y la Paz), junto con Marcha Patriótica y la Cumbre Agraria Campesina Étnica y Popular, entre el 1 de enero y el 17 de noviembre de 2018 fueron asesinados 226 líderes sociales y defensores de los derechos humanos en 112 municipios del país colombiano.
El director de Indepaz, Camilo González Posso, asegura que:
“El incremento en los homicidios obedece a dos conflictos: el territorial y el de los recursos. Este último hace referencia a temas de renta en la minería ilegal y en los cultivos ilícitos”.
En 2018 hubo un incremento respecto a los últimos años, pues en el año 2016 se registraron 97 casos y en 2017 hubo 159, aunque el punto álgido de la situación fue el registrado en el año 2003 con un total de 1.912 de estos homicidios.
Asimismo, este informe concreta que durante los primeros 100 días de mandato del presidente Iván Duque se registraron 120 líderes sociales asesinados.
Las zonas más afectados durante el año han sido el Cauca con 48 casos, Antioquia con 33, el Valle del Cauca con 19, el Norte de Santander y Putumayo con 18, Nariño con 13 y Córdoba, Meta y Caquetá con 11.
González reiteraba en el mismo informe que:
“Tenemos que recordar que en estos departamentos no hay presencia de las mal llamadas disidencias de las Farc, sino que los presuntos autores son el Eln y aliados del narcotráfico”.
Por otro lado Leonardo González, coordinador de la Unidad Investigativa de Indepaz, afirmaba:
“A esos lugares que dejó la exguerrilla han llegado otros actores, como paramilitares y el Eln, a copar territorios, y lo han hecho desde la fuerza” y además en el estudio «se pudo determinar que las amenazas a estas personas [líderes sociales asesinados] eran dirigidas de manera directa e indirecta por medio de panfletos y mensajes de texto”.