El Senado de Estados Unidos avanzó este miércoles con una medida para retirar el apoyo estadounidense a la coalición liderada por Arabia Saudí en la guerra de Yemen. En un revés para el presidente Donald Trump, 63 senadores votaron a favor y 37 en contra para dar seguimiento a una moción sobre el fin del apoyo de EEUU a los saudíes.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, y el secretario de Defensa, Jim Mattis, habían exhortado a los senadores a no apoyar la moción, diciendo que eso empeoraría la situación en Yemen. La votación se produce tras el asesinato el 2 de octubre del periodista Jamal Khashoggi, crítico del reino y autoexilado en Estados Unidos, en el consulado saudí en Estambul, Turquía.
Los senadores, que se reunieron a puerta cerrada para discutir las relaciones con Arabia Saudí, criticaron la ausencia de la directora de la CIA, Gina Haspel, que escuchó una grabación de la muerte del periodista suministrada por las autoridades turcas. La semana pasada, Trump rechazó una investigación de la agencia norteamericana, que concluyó que el príncipe heredero saudita Mohamed bin Salman ordenó el asesinato de Khashoggi.
El conflicto entre la coalición militar liderada por los saudíes y los rebeldes hutíes mató a miles de personas y dejó millones de yemenitas al borde del hambre. Estados Unidos provee apoyo de los servicios de información y vende armas usadas por los saudíes en Yemen. La guerra comenzó en 2014 cuando los rebeldes chiíes hutíes tomaron el norte del país y la capital Saná, obligando al Presidente a huir.
En marzo de 2015, el conflicto escaló drásticamente con el inicio de los ataques aéreos contra los hutíes , con el objetivo de restaurar el Gobierno. Los ataques fueron conducidos por Arabia Saudí y otros países árabes musulmanes sunníes, apoyados por EEUU, Reino Unido y Francia.
En las últimas semanas, los líderes de los hutíes dijeron estar listos para un alto el fuego si «la coalición liderada por los saudíes quiere la paz». La coalición ordenó recientemente la suspensión de una ofensiva en Al Hudayda, un puerto vital en el Mar Rojo.
El enviado especial de la ONU a Yemen, Martin Griffiths, dijo esperar que las negociaciones de paz sean convocadas antes de fin de año.